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Cultivo de setas

Cultivo de setas

Muchas veces nos interesaría el saber cómo poder cultivar en casa algunos tipos de setas…

Pero claro, no todas las setas las podremos cultivar en casa y menos si no disponemos del espacio.

Si tienes un terreno forestal o una parcela en propiedad y no le sacas rendimiento, pero además eres aficionado a las setas…

¿Por qué no convertirlo en tu coto privado de setas?

Hoy en día, hay varias maneras para poder hacerlo. Siempre que dispongas de tiempo y paciencia…

En un terreno en el que crecen espontáneamente algunos tipos de árbol, por ejemplo pinos (P. Pinaster), se podría optar por micorrizar las raíces con alguna de las setas afines (Rovellons), con una de las “papillas liofilizadas” que venden preparadas para ello.

Si tienes el terreno, pero no tiene árboles, puedes optar por plantar algunos de los que ya venden micorrizados con algún tipo de setas.

¿Cómo plantar los pinos?

Algunos consejos que pueden sernos útiles a la hora de crear nuestro propio “Bosque de setas”… y plantar los pinos que lo componen.

Las raíces deben quedar bien distribuidas y extendidas, nunca torcidas o con sus extremos doblados o hacia arriba.
La tierra alrededor de la planta debe ser apisonada para evitar que queden espacios con aire alrededor o entre las raíces. También se debe evitar que caigan hierbas u hojas en el hoyo de plantación porque luego se secan y quedan espacios de aire.
No utilizar abonos en la plantación para evitar que se quemen las raíces.
Hacer un agujero lo suficientemente grande (Según la planta) con la pala en el lugar que vayamos a efectuar la plantación, teniendo en cuenta que el terreno sea adecuado y sin demasiadas piedras. El terreno un poco arenoso, facilitara el drenaje y enraizamiento, pero también la desecación de la planta.

La separación entre los árboles debe ser de tres metros aproximadamente y es aconsejable colocarlos en alineación para facilitar los posteriores trabajos forestales.
Colocar la planta en el centro del hoyo, teniéndola con una mano y cuidando de que las raíces queden bien extendidas, con la otra mano irá echando la tierra extraída de la parte superior, previamente desmenuzada, sobre las raíces. Una vez que el sistema radical está cubierto y sin soltar la planta para evitar que se doblen las raíces, compacta la tierra con la mano libre. Posteriormente va agregando el resto de la tierra y comprimiendo la misma alrededor del plantón que debe quedar en posición vertical.

Los plantones den estar bien humedecidos y no se deben extraer del recipiente que los contiene hasta el momento de efectuar la plantación. Posteriormente se pueden regar, pero sin inundar demasiado el agujero. Un riego regular, siempre que sea posible, también facilitará que el árbol enraice y crezca fuerte.

 

Y si no tienes un terreno, pero dispones de un mínimo de espacio en tu casa, también puedes dedicarte a cultivar setas que no necesitan de árboles “vivos” para crecer: Gírgolas, champiñones, setas chinas (Shiitake), setas de chopo, etc…

Quizás la primera pregunta que surge, es de cómo poder conseguir los micelios con los substratos adecuados. Los estudios para algunos tipos de setas, están muy avanzados y podemos conseguir sus micelios a precios razonables. Por lo que no necesitamos montar un laboratorio, ni perder tiempo en los estudios...

Hay laboratorios comerciales, que se dedican a elaborar los micelios necesarios, para poder cultivar setas en casa…

O sea que, si dispones de un terreno o local, que se pueda adaptar a las circunstancias… ¿Por qué no intentarlo?

Has visto esto:

http://www.hifasdaterra.com/index.php/2012/06/06/como-cultivar-colmenillas-morchela-angusticeps/

La colmenilla o Morchella angusticeps se puede cultivar en un sustrato específico de compleja elaboración que combina restos vegetales, inoculo específico para el cultivo de colmenilla y carbonato cálcico. En Hifas da Terra elaboramos el inoculo que podemos emplear, por ejemplo, en una pequeña parcela de jardín en la que hayamos quemado restos de leña o madera.

¿Por qué es recomendable el cultivo sobre un suelo donde se haya llevado a cabo una hoguera?

En el momento en el que se realiza una quema, el suelo queda sin vegetación por lo que resulta ideal para el cultivo de esta especie micológica. La combinación del restos vegetales carbonizados con los otros dos elementos determinarán la viabilidad de este especial cultivo micológico.

Calendario de cultivo micológico

Recomendamos aplicar el inoculo en los meses de otoño como diciembre para que, al llegar la primavera, podamos ver las primeras colmenillas.

Cómo producir Colmenillas

Para llevar a cabo el cultivo aplicaremos en primer lugar el carbonato cálcico y, más tarde, el inoculo sobre la superficie desprovista de vegetación. A continuación rastrillaremos la zona para enterrarlo y taparlo con una fina capa de cenizas o restos sobrantes de la quema de madera. Al cabo de 3-4 meses saldrán las primeras colmenillas.

¿Hay que repetir la inoculación de forma anual?

Una vez realizada la inoculación, ya no es necesario repetir la operación en los próximos años. La superficie queda micorrizada y la producción de setas se repetirá cuando las condiciones sean las adecuadas.

O esto otro:

El hongo morchella (colmenilla) tiene un sabor único muy valorado por los cocineros gastrónomos. Usado extensamente en la cocina francesa, el hongo morchella tiene un intenso sabor terroso y a madera que suele describirse como adictivo. Las morchellas son caras pues les toma tiempo crecer y tienden a crecer naturalmente en áreas quemadas por los incendios forestales. Mucha gente disfruta al recolectar hongos, pero las morchellas también pueden crecer en los patios si se prepara la tierra adecuadamente, y con los suficientes cuidados y paciencia. Usar micelios comprados comercialmente elimina mucha de la dificultad que tiene el cultivar estos hongos.

Instrucciones: 

1_ Coloca los micelios comprados en un lugar oscuro con una temperatura de 50 a 80 grados Fahrenheit (10 a 26 C) durante una semana. Esto permitirá que los micelios se recuperen del viaje.

2_ Encuentra un área sombreada orientada hacia el norte. Los hongos morchella suelen crecer en áreas cerca de robles sobre colinas al norte. Los lugares frescos lejos de aspersores producen los mejores resultados.

3_ Labra el suelo a un profundidad de 6 pulgadas (15 cm). Mezcla las virutas de madera, cenizas de madera, musgo de turba y arena por partes iguales. Aplica una capa de 4 pulgadas (10 cm) de mezcla sobre el suelo y mezcla bien. Distribuye los micelios de acuerdo a las instrucciones del producto y mezcla bien con la tierra. Agrega bastante agua.

4_ Cubre todo el cultivo con unas cuatro pulgadas (10 cm) de virutas de madera y agua. Continúa regando cuando el suelo se sienta seco en la superficie, pero evita que quede demasiado húmedo.

Más:

Cómo realizar un cultivo de morchellas en interiores

Los hongos morel pertenecen al género de los morchella, el cual abarca al menos 6 especies. Los cocineros destacan este tipo de hongos por su sabor delicado y natural, especialmente en la cocina francesa. Las morchellas son difíciles de cultivar en grandes cantidades, por lo que existen cazadores de setas que satisfacen las necesidades comerciales recolectando hongos silvestres. Hay jardineros particulares que los cultivan en interiores, a pesar de que la producción de sus cuerpos fructíferos es algo lenta.

Instrucciones:

1_ Realiza unos agujeros de drenaje en la base de un molde metálico, como puede ser un molde de pasteles, para usarlo como bandeja de fructificación. Limpia la superficie con una solución al 5% de cloro para esterilizarla.

2_ Prepara un sustrato que contenga un 50% de compuesto orgánico, 30% de tierra para macetas y un 20% de arena. Añade suficiente polvo de piedra caliza en la mezcla como para aumentar su pH a 7,2. Llena la bandeja con el sustrato hasta llegar a 2 pulgadas de profundidad.

3_ Remoja el sustrato con agua y déjalo escurrir por completo. Agrega las semillas de morcella siguiendo las instrucciones del fabricante.

4_ Coloca la bandeja en una habitación con la temperatura adecuada y sin luz. Mantén una temperatura entre los 65°F y 70°F, con al menos un 90% de humedad. Unos bultos duros de micelio conocidos como schlerotia deberían formarse sobre el sustrato entre 4 a 6 semanas.

5_ Refrigera la bandeja de fructificación a 39°F durante dos semanas. Poco a poco agrega 2 onzas de agua por cada pie cuadrado de superficie de la bandeja. Deja drenar el agua durante todo un día.

6_ Vuelve a colocar la bandeja en el cuarto de cultivo. Mantén la humedad relativa sobre el 90% y la temperatura aproximadamente en 72°F. Utiliza luces de crecimiento, para proporcionar 12 horas de iluminación y 12 horas de oscuridad. Los tallos de las morcellas deberían aparecer tras una semana. Cosecha los hongos a medida que van creciendo..

Cultivo de Setas de Cardo Pleurotus eryngii en alpacas

Se trata de una de las setas comestibles más demandadas, su sabor y textura hacen de las setas de cardo un manjar exquisito muy buscado por los amantes de la micología

La seta de cardo Pleurotus eryngii crece sobre las raíces de los cardos del género Eringium. Debido a que la aparición de este hongo en la naturaleza no es homogénea o simplemente no está al alcance de todo el mundo, durante años se han realizado muchos esfuerzos para conseguir cultivarla de forma controlada. 

Seguidamente os enseñamos el procedimiento para elaborar nuestra alpaca de setas de cardo:

Elección del sustrato adecuado

Debemos de tener muy en cuenta el sustrato utilizado para cultivar setas de cardo.

Lo más recomendable es usar:

- Serrín de frondosas (55% - 60%)

- Cascara de semillas (20%) las cuales hay que tenerlas durante 24 horas en cal

- Salvado de trigo (25%)

- Harina de maíz (4%)

- Carbonato cálcico (1%)

 

Esterilizar el sustrato 

Para minimizar el riesgo de que el micelio se pueda contaminar con otras bacterias que se encuentren en el sustrato, es necesario esterilizarlo (recomendamos humedecer el sustrato antes de esterilizar).
Podemos elegir dos maneras diferentes de hacerlo dependiendo de los medios y herramientas de los que dispongamos.
 
La técnica más sencilla es utilizar dos recipientes de plástico y colocar uno de otro para crear una bolsa de aire que nos permita mantener la temperatura durante más tiempo.
 
En el recipiente pequeño se coloca el sustrato y se le añade agua casi hirviendo (90ºC) hasta cubrirlo por completo. Debe permanecer así durante al menos una hora. Una vez esterilizado lo escurriremos y esperaremos a que su temperatura descienda hasta unos 25º (temperatura ambiente).

La otra técnica (si disponemos de los medios necesarios) es aplicar vapor al sustrato a una temperatura de 120ºC durante una hora. Transcurrido el tiempo lo escurrimos y lo dejamos enfriar a temperatura ambiente.

 

Inocular el micelio

Antes de inocular el micelio debemos de asegurarnos que la superficie de trabajo esté lo más limpia y desinfectada posible, para ello podemos utilizar una mezcla de alcohol y agua.
 
Una vez desinfectada el área de trabajo procederemos a inocular el micelio, para ello mezclaremos externamente el sustrato con el micelio (entre un 5% y un 10% en proporción al peso total de la alpaca). Cuando ya tenemos inoculado el micelio pocederemos a llenar las bolsas de plástico transparente dejando espacio para poder cerrarlas.
 
Deberemos realizar una serie de pequeñas perforaciones en la bolsa, con la finalidad de conseguir una buena oxigenación del micelio.

 

Incubar el micelio

Ya tenemos las bolsas elaboradas y con el micelio inoculado, ahora procederemos a incubar el micelio.
 
Es muy importante manejar correctamente esta fase, procurar que la incubación sea lo más rápida posible.
 
Debemos alcanzar los 24ºC - 25ºC en el interior del sustrato en el menor tiempo posible. Posteriormente la temperatura del sustrato irá aumentando, debemos evitar que sobrepase los 30ºC.
 
Para conseguir mantener estos rangos de temperaturas es necesario disponer de un sala climatizada, en la cual podamos elevar o disminuir la temperatura de forma mecánica.
 
Una vez el micelio ha invadido todo el sustrato, no antes de 14 días, se debe retirar la bolsa de plástico dejando la alpaca al descubierto, y suministrar turba por toda su superficie sin más limitación que la que pueda adherirse al bloque.

 

Fructificación

La fructificación de la seta de cardo se produce entre los 15 y 25 días desde el inicio de la incubación, dependiendo de las condiciones del cultivo.
 
La temperatura de cultivo adecuada para obtener buenos resultados oscila entre los 12ºC y 18ºC. Si la temperatura es inferior a 12ºC puede retrasarse la aparición de los primordios e incluso no aparecer.
 
Con temperaturas superiores a 18ºC la calidad y el rendimiento de las setas disminuye, si las temperaturas son muy elevadas la producción disminuye e incluso puede ser nula.
 
Para inducir a la fructificación, necesitamos además de una ventilación suave y un índice de humedad alto (75% - 80%), posteriormente debemos disminuir la humedad para evitar la aparición de bacterias en el cultivo.

 

Cosecha 

Las setas de cardo deben cosecharse arrancando el racimo de setas completo. Éste debe retirarse antes de que los sombreros de los ejemplares más grandes cambien la forma de su sombrero de convexo a cóncavo.
 
En ocasiones y si tenemos experiencia, es posible cosechar las setas individualmente, permitiendo que los ejemplares más pequeños se sigan desarrollando.

 

LO QUE VD. DEBE SABER SOBRE SETAS CULTIVADAS:

http://www.saber.es/web/biblioteca/libros/setas-cutilvadas/setas-cutilvadas.pdf

http://www.alzinar.com/actualitat/ara_pots_sembrar_bolets_al_jardi

http://www.boletsdesoca.com/

Más sobre las morchellas

http://associacioboletaireindependent.cat/index.php/ca/bolets/bolets/53-murgula-morchella

¡Buena cosecha!

 

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