TRASTORNOS MENTALES NERVIOSOS
Amanita muscaria
Amanita muscaria. Tóxica
Su sombrero es grande, puede alcanzar los 20 centímetros, incluso los 25. Globuloso en su juventud, se extiende poco a poco, llegando incluso a deprimirse algo. La Cutícula pose un rojo brillante, salvo que la lluvia lo puede decolorar en cuyo caso adopta un color amarillo anaranjado. Toda su superficie brillante y sembrada de gruesas pústulas blancas primero, y posteriormente amarillentas con el paso del tiempo; son irregulares, algodonosas y pueden llegar a desaparecer en condiciones adversas. El margen es denso, regular y se halla señalado de cortas estrías que son visibles principalmente cuando el sombrero se halla totalmente extendido. Es la clásica seta roja de manchas blancas que aparece en los cuentos de niños. Las láminas son libres y desiguales y de color generalmente blancas o tamizadas de amarillo. La carne blanca, de un amarillo anaranjado bajo la cutícula. Es tóxica, esta amanita contiene una sustancia capaz de matar a las moscas pero no tiene el mismo poder en el hombre. Provoca principalmente trastornos digestivos, o de tipo nervioso que se manifiestan en síntomas de borrachera seguidos por un sueño profundo. Parece que la sustancia tóxica se concentra principalmente en la cutícula.
Amanita pantherina
Amanita pantherina. Tóxica
Tiene un sombrero que mide entre 6 y 10 centímetros, primero hemisférico, más tarde convexo, y por fin extendido. La cutícula es húmeda, brillante, de color pardo oscuro u ocráceo, sembrado de pequeñas verrugas blancas, harinosas dispuestas en círculos concéntricos. El margen se halla precozmente estriado. Las láminas son de color blanco. Su carne es de color blanco inalterable y exhala un débil olor a rábano en los ejemplares frescos. Es una seta muy peligrosa y provoca intoxicaciones violentas, pero raras veces resulta mortal. Posible confusión con las Amanitas comestibles como la A. Rubescens y la A. Spissa. El sombrero de la A. Panterina es de color pardo con placas pequeñas y blancas y los bordes estriados; En la A. Rubescens, es marrón rojizo-vinoso con placas harinosas gris vinosas y los bordes no estriados, la carne enrojece al contacto, anillo más estriado y más alto al igual que la A. Spissa, esta además, presenta la terminación bulbosa del pie de manera napiforme y bordes del sombrero no estriado | Flickr cc V.H. Hammer.
TRASTORNOS MENTALES. PREDOMINIO DE TRASTORNOS NERVIOSOS
Toxinas
Las sustancias responsables de la intoxicación, no son las descritas en el pasado, (como la muscarina que apenas se encuentra en Amanita muscaria y A. pantherina) sino las siguientes: ácido iboténico, muscimol (la más potente) y muscazona. Estas sustancias son derivados ixozálicos que actúan como falsos neurotransmisores.
También se encuentra como sustancia responsable la panterinina (sólo presente en Amanita pantherina).
Incubación
El periodo de incubación comprende desde la media hora a las tres horas después de la ingestión de setas.
Síntomas
Suelen ser muy variables, debidos no sólo a la cantidad ingerida de tóxicos, sino también a la reacción personal del consumidor y a la presencia de otras sustancias activas, que varían dependiendo de las zonas donde se recojan las setas, de las variedades y de las formas de conservación y preparación.
Son frecuentes los trastornos gastrointestinales y motrices: como náuseas, vómitos, vértigos, incoordinación parecida al estado de embriaguez, agitación, dilatación anormal de la pupila y en ocasiones enrojecimiento de la piel y taquicardia.
Lo más típico, sin embargo, es la presencia de síntomas neurológicos, con desorden mental, euforia, dificultad de coordinación y de habla, estado de embriaguez, agresividad, alucinaciones y confusión mental.
La intoxicación por grandes dosis puede llegar a ser mortal. Normalmente, las alteraciones no duran más de un día y acaban con un sueño profundo más o menos reparador.
La intoxicación por ingestión de A. pantherina es de mayor gravedad y, aunque rara vez, puede llegar a ser mortal.
Tratamiento
Debe ser sintomático y de soporte. Se recomienda la posible eliminación de restos de setas del aparato digestivo mediante el lavado de estómago, pero es mucho más útil la diuresis forzada. Al producirse unas alteraciones nerviosas tan cambiantes, es precisa una vigilancia estrecha de la persona intoxicada.
Los antídotos se administrarán en función de la sintomatología. Los barbitúricos no están recomendados. Sin embargo, la fisostigmina, es muy útil en el caso de síntomas anticolinérgicos.
El uso de atropina sólo es recomendable en el caso de observarse síntomas de estimulación colinérgica, al encontrarse, muy raramente, una dosis alta de muscarina.
Especies
Amanita muscaria (L.: Fr.) Hooker
Amanita muscaria var. aureola Boudier
Amanita muscaria var. formosa Pers.: Fr.
Amanita regalis Michael
Amanita pantherina (DC.: Fr.) Kum.
Amanita gemmata Fr. : = A. junquillea Quél (Sospechosa de intoxicación, ha causado alguna muerte).